ISMAEL SERRANO EN MENDOZA
Si hay un músico al que se le puede asignar el título de “TROVADOR”, sin dudas sería a Ismael Serrano. El madrileño hizo su paso por Mendoza, dentro del marco de su gira por la Argentina, presentando su último trabajo discográfico, el noveno de estudio, que lleva el nombre de “La Llamada” En palabras del propio Ismael, el título del álbum hace referencia “a los llamados del carnaval uruguayo, que incita a la gente a salir de sus casas y los lleva al encuentro”.
A las 21.45 hs en punto, da inicio el concierto de la mano de “Absoluto”, ante un Auditorio Ángel Bustelo repleto con público de todas la edades. Recibido con una ovación, continuó su repertorio con “¿Dónde estarás?”, canción que pertenece a su primer trabajo discográfico. La siguieron “Te vi”, “No estarás sola”, “Pequeña bachata mediterránea”, “El día de la ira”, “Últimamente” (canción coreada por los asistentes de forma inmediata)
.Dando paso a una puesta en escena no antes vista en los shows del cantante. A través de mapping (proyección de imágenes sobre un telón blanco ubicado en el escenario) correctamente ejecutado, se vieron las imágenes que dieron lugar a los acordes de “Rebelión en Hammelin” y “Peces de ciudad”. Creando un clima íntimo en el ambiente, llega la interpretación de “Ahora que te encuentro”, quizás uno de los momentos más emotivos de la noche, junto con “Recuerdo”. Incluidas, dentro de un repertorio variado, siguieron “La casa y el lobo”, la ya antes mencionada “Recuerdo”, “Érase una vez” y “Ya ves”.
Ya dejando fuera la parte de la tecnología, Serrano interactúa con sus espectadores y realiza interesantes introducciones a través de leyendas o diálogos, que mantienen expectantes a sus admiradores, manejando los climas de la noche casi a su antojo. “Todo empieza y todo acaba en ti” se hace presente, acompañada por la clásica “La extraña pareja”. La sigue “Candombe para olvidar” del disco nuevo, demostrando así, parte de la alegría que contiene su nuevo álbum.
El final de “Te debo una canción”, dio lugar a un atrapante relato plagado de la conciencia social y política que caracterizan a un Ismael siempre comprometido. Dicho relato desemboca en “Papá cuéntame otra vez” respaldada por imágenes de la crisis europea, y alguna que otra, de caudillos que lucharon en contra del sistema.
Y llega el momento de la despedida, de la mano de la canción homónima al disco presentado, con la particularidad de que la gente ya no permanecía en sus asientos, sino que respetuosamente se ubicaron frente al escenario y bailaron y cantaron al son de “La llamada”. Llega la primer retirada, y ante el pedido de los presentes, vuelven al escenario para interpretar “Ana” y “El virus del miedo”. Ante una inminente segunda despedida, los asistentes se negaban a no escuchar otras interpretaciones más. Serrano y compañía regresan e interpretan una canción inédita, y terminan por coronar la noche con “Cien días” Dos horas y cuarenta y cinco minutos de show y una veintena de canciones q sin dudas hicieron que, cientos de mendocinos respondan a “ La llamada” de un Ismael Serrano, que fiel a su estilo, supo mantener cautivo a su público de principio a fin, en una noche mágica.